La conclusión de una temporada se vive siempre como una pequeña muerte.
En este momento de agonía en el que borro del calendario los últimos días de estancia en Kazajistán, es difícil huir de los balances y que estas ultimas páginas estén ocupadas por los naturales lamentos, sonrisas nostálgicas ante la anécdota simpática o las primeras victorias, abrazos de agradecimiento, miradas cómplices y por que no de traiciones y decepciones consustanciales a la vida del ser humano.
Quedan atrás los días iniciales de diarreas, incomprensiones lingüísticas, culturales y futbolísticas, los cambios, los choques, las sintonías, la añoranza de los seres queridos, el hombro amigo en que apoyar las lágrimas y la pared protectora de la espalda desprotegida ante el enemigo.
Pero sobre todo la sensación de haber vivido una experiencia tras la cual nada volverá a ser igual. En lo personal tras sobrevivir medio año a un choque de vida cotidiana tan diferente, en convivencia de 24h con jugadores y técnicos con lo difícil que esto es, hasta con la pareja que uno elige voluntariamente. Los largos vuelos a ciudades distantes y en muchos casos con equipamientos y condiciones de vida tan precarios. Las previas de partidos en los que te comentan hasta el precio económico que pagó el rival para vencerte al día siguiente. Y tantas otras experiencias de esas que curten la piel de cualquier persona y te hacen ver que no volverás a ser el mismo nunca más por que de tanto estirarte para adaptarte te has hecho más grande.
En lo profesional un reto más por no abandonar la bandera a pesar del vendaval que te rodea. En medio de un asedio directo en el que el balón para poco por el suelo excepto para reanudar el juego en las interrupciones continuas que provocan y en las que son especialistas en convertir en decisivas en el marcador final (el campeón de Liga hizo 17 goles en saque de banda). En medio del músculo y la cinta métrica como único baremo para fichar jugadores en la secretaría técnica, rodeados de técnicos que sólo creen en el cronómetro y las cifras, salgan de donde salgan. En campos imposibles, en días de 45º y de estar bajo cero, en un mundo de veteranos jugándotela con chavales, gestionando egos multiculturales y plurinacionales...
Al final, la satisfacción del matrimonio entre objetivos del club, es decir, resultados e ideas futbolísticas irrenunciables que te reencuentran con las sensaciones que a uno le hicieron hacerse entrenador. El reconocimiento público de los entrenadores rivales del cambio de juego del equipo, la seguridad del jugador a irse hacia adelante sin el miedo inicial que le obligaba a retroceder, la transmisión de su disfrute dentro del campo, la alegría infantil del juguete soñado de los jóvenes canteranos que viste debutar en la máxima categoría, alguno de ellos con el descaro para liderar al equipo durante muchos partidos en el puesto más vital de un equipo, el centro del campo.
Y todo ello, con la guinda final de la victoria a uno de los candidatos a jugar en Europa que llegó a Almaty como tercero y se fue sexto. Y esa recompensa final, que no da de comer cuando estas en el paro pero alimenta tu sospecha de que seguirás en el camino, el reconocimiento de los principales receptores de tu trabajo, la afición y tus jugadores. Esa amable y cálida ovación final, esos abrazos que dicen tanto en la intimidad del vestuario...
Todo esto te hace pensar que esta muerte engendra una esperanza en la resurrección, no sólo personal en este Club u otro, sino también en el fútbol Kazajo y en la memoria del aficionado del F.C.Kairat. Ahora ya saben que se puede ganar, sintiendo orgullo por las formas que utiliza su equipo y se puede perder confiando en que la victoria próxima no estará lejos. Quién ve la luz no quiere volver a vivir en la oscuridad.
El fútbol es grande por todas estas emociones que hemos podido vivir juntos y que a mi me habéis permitido sentirlas pero esta vez tan lejos de mi entorno vital.
Corría el año 2000. Vivía en Benalmádena (Málaga) y la televisión de esa localidad me planteó la posibilidad de dirigir un programa de televisión sobre fútbol. Mi alma de escalador me hizo ver el reto como una cima más que asaltar y asumí la propuesta. El programa lo llamamos "El fútbol es así", los contenidos intenté que fuesen más pretenciosos y originales que el título.
Entre otras secciones realizamos una para ayudar en la formación de jugadores jóvenes, "Cuestión de principios". La primera entrega la grabamos en el campo del Benamiel con sus equipos infantiles.
Por entonces varios niños me llamaron la atención por su descaro y los seleccionamos para montar las imágenes de este capítulo. Casualidades del destino, años después, uno de ellos, se convirtió en la estrella del mejor Málaga de la historia. Su nombre Isco.
Vaya la reproducción de aquel capítulo primero, en forma de pequeño homenaje a todos aquellos formadores que en el anonimato de pequeños equipos de pueblos o barrios están actualmente con escasos recursos y muchos sacrificios forjando a las futuras estrellas, en el deseo que estos proyectos de jugadores no olviden nunca sus principios, ni tan poco los del fútbol.
La idea surgió tras un encuentro de esos que ves implicado emocionalmente en lo que pasa entre las cuatro líneas. El corazón partido porque de un lado juega un amigo, un ser querido por mi y toda mi familia, Juan Mata. En el otro un compañero de método, serio, honesto y que además del respeto debido como al resto, le profesas una profunda admiración, Arsene Wenger. Si, era un Arsenal-Chelsea. Normalmente el ventajismo imperante en nuestro mundo, tras ganar el Chelsea 1-2 sería lógico hacer una loa al ganador. En este caso, la alegría del amigo vencedor, me resultó suficiente para alimentar mi alegría. Pero para hacer justicia al trabajo y las ideas del compañero, me parecía oportuno desempolvar un artículo leído hace tiempo y, a modo de homenaje al perdedor momentáneo, resaltar su admirable obra y pensamiento.
Agradezco a su autor,
Óscar Méndez Albano,el esfuerzo por exponer parte del pensamiento del Maestro Wenger, que yo sólo a continuación os resumo.
Arsene Wenger se ha convertido discutidamente en el Manager de la Premier más respetado e influyente y su influencia ha tenido efectos similares en el el resto del mundo futbolístico. Clubes como Lyon o Newcastle siguen sus métodos que incluyen políticas tanto económicas como de captación.
MODELO DE JUEGO
Su defensa está muy orientada hacia el ataque. Atacan sus mediocampistas rápidamente con una presión intermedia que alterna entre una forma de rombo o de una línea de cuatro “plana”. Esta forma de presionar resulta muchas veces de mucho riesgo pero dada su filosofía, es un riesgo que están dispuestos a tomar.
• Wenger demanda una defensa agresiva, orientada hacia el balón y la cultiva manteniendo el bloque muy sólido, corto y estrecho practicándolo constantemente con los ejercicios en espacios reducidos. Cuando el Arsenal consigue el balón, su ataque es muy vertical, pases y desmarques horizontales deben ser evitados.
• Wenger pone atención especial en la comunicación del equipo. Cada ejercicio es acompañado de gritos y órdenes que son altos y claros, agresivamente si la situación lo requiere, y el juego positivo es reforzado con aliento y aplausos. Los jugadores deben cooperar entre si construyendo una moral y espíritu colectivo para el “estilo Arsenal”.
“Me gusta tener a un media punta detrás del centro delantero, y uno o dos en las bandas que puedan jugar por adentro. Siempre pienso que si tienes a jugadores que pueden entregar el balón decisivo en todos los sectores del campo, tienes muchas mas oportunidades de ser creativo. Si solo estás enfocado en la parte central del campo, donde hay generalmente más jugadores, tienes más espacios en las bandas para crear”.
“Construyes al equipo para adaptar la posición que puedan encajar mejor los jugadores. Por ejemplo, no veo a Kaka, que es alto, jugar en banda. Cuando tienes a un jugador más pequeño que es creativo, entonces estas más pronto para moverlo hacia una banda. Porque normalmente son muy rápidos cuando giran. Algunos como Bergkamp o Kaka , deben jugar por el centro.”
Al equipo se le pide que presione constantemente arriba. Se puede escuchar en los partidos a los entrenadores pedirle a los de “arriba” que presionen en sectores ofensivos. La defensa debe poder salir jugando y armar el juego desde atrás, manteniendo y evitando que el rival pueda presionarlo.
Contrario a la mayoría de equipos ingleses, el Arsenal basa su juego en una cantidad innumerable de pases cortos de la mitad del campo rival, hasta que se acercan a portería rival donde todos los jugadores son estimulados a tomar riesgos y jugársela en una jugada donde puedan generar peligro con confianza y determinación. Los errores son permitidos, aunque no así el jugar sin cuidado y el perder el balón que son prohibidos.
Sus jugadores deben tomar ventaja de la correcta utilización del terreno de juego, generando siempre triángulos donde el poseedor del balón siempre tendrá a dos compañeros como apoyos.
LO PSICOLÓGICO:
Su comportamiento está basado en el concepto de simplicidad y de ser directo con sus dirigidos. A cada jugador se le entrega un rol táctico en el campo, lo cual es documentado lo más simplemente posible, en consecuencia cada actuación es medida o evaluada .
Cree que la rigidez como entrenador es la mejor manera de construir respeto y que dicha cualidad es imitada por sus dirigidos. Wenger a veces castiga a sus jugadores en el banco de suplentes, para mantenerlos humildes con los pies en el suelo.
Estimula a que sus jugadores pregunten las causas de sus ejercicios físicos o tácticos ya que esto les hará aprender porque es importante mejorar este lado de su juego y remarcará aún más su compromiso con el entrenamiento
Afirma que el compromiso a la preparación es la base del éxito. Para crear una actitud profesional, Wenger insiste que sus jugadores lleguen 30 minutos antes a entrenar para prepararse mentalmente para la sesión. Esto permite una actitud relajada y calma que Wenger insiste que es de primordial importancia para un entrenamiento óptimo. La Calma debe estar combinada con la estricta disciplina.
Sus tres reglas para el entrenamiento son:
Cuidarse a cada uno en el campo de juego.
Mantener una ética de trabajo fuerte.
Prestar atención a los detalles.
Es un creyente en la psicología y suele decirles afirmaciones durante los entrenamientos
de una técnica basada en el NLP (Programación neuro-lingüística) que son órdenes y cumplen la función de reforzar la conducta deseada. El objetivo es motivar al jugador y lograr que este tenga confianza cuando tiene el balón.
Sus frases:
Juega a tus puntos fuertes, así ganarás.
No hay éxito sin sacrificio.
Toma el balón y cree que puedes ganar.
Recuerda los detalles, trabaja en lo básico.
Su aproximación a la dinámica grupal está marcada por la comunicación, confianza, y autoconfianza.
Este proceso tiene tres pasos que son construidos alrededor del factor psicológico que el cree que más contribuyen en el resultado:
1. Generar cohesión grupal con una mentalidad positiva.
2. Concentración como un bloque defensivo.
3. Refinar fuerzas individuales.
Cree que la preparación es clave para el éxito. Lo suma con las siguientes formulas (que son entregadas a los jugadores en un librillo personal) enfocadas en lo que hace a un equipo y la ecuación para la selección de un encuentro:
La ecuación del equipo = (1+2+3+4+5+6+7+8+9+10+11) x N
N = la influencia del entrenador.
Un jugador que no esté preparado resta de la capacidad del equipo y entonces el rol del entrenador es preparar al equipo y transferirles confianza.
Rendimiento + esfuerzo consistente en los entrenamientos = selección para el equipo.
Comunicación siempre ha sido enfatizada dentro y fuera del campo, dando aliento, estando atento al peligro y ayudando a crear opciones.
SUS ENTRENAMIENTOS:
Cada entrenamiento esta “influenciada” por el encuentro anterior.
Sus entrenamientos nunca superan los 90 minutos, y los días antes de los partidos los 60 minutos enfocándose principalmente en jugadas a balón parado y ejercicios de coordinación y velocidad.
Calentamiento:
Generalmente el mismo se efectúa dentro de gimnasio.
Consiste en ejercicios en bicicleta estática, Pilates, fútbol tenis y ejercicios de fuerza. La fuerza siempre la ejecutan al principio de la sesión luego del calentamiento y la misma es llevada a cabo por un preparador físico.
El mismo es el que guiará la dirección del entrenamiento individual, de resistencia y tests de velocidad que se efectuarán a lo largo de la temporada.
La fuerza irá enfocada hacia dos áreas:
La de prevención de lesiones y la deportiva.
METODOLOGÍA:
La sesión principal empezará con juegos pequeños enfocados en táctica ofensiva: pases cortos, combinaciones, salidas desde el fondo, y ejercicios de 1x1 con portería. Alternadamente esta parte de la sesión puede estar también dirigida hacia la técnica, coordinación o velocidad.
Los jugadores entonces empiezan a moverse hacia ataques posicionales y finalización, como también ejercicios con fines tácticos grupales o sectoriales, juego defensivo para los mediocampistas y atacantes, situaciones de fuera de juego y defender el 1x1.
La sesión concluye con ejercicios de resistencia, principalmente ejercicios de práctica, o a veces correr sin balón.
Para las sesiones, es el primero en llegar y el último en irse llevando a cabo todo por el cronómetro. El primer día después del partido, es libre permitiendo a los deportistas un día libre para recuperarse y socializarse con amigos y familia antes de recuperarse mentalmente. Las sesiones comienzan a las 11:00 am y comienzan con el calentamiento, luego va la parte principal que durará unos 45 minutos aproximadamente. Los deportistas deben llegar una hora antes para prepararse y a las once comienzan los ejercicios de calentamiento. Las sesiones nunca superan los 90 minutos.
La mayoría de los ejercicios no superan los 4 minutos, mientras que los partidillos no superan nunca los 10 minutos
Cuando se integran ideas tácticas nuevas, generalmente se darán al comienzo de la sesión cuando el deportista está fresco y abierto. Si funciona se mantiene.
Se entrena con variaciones de 4 x 4,5 x 5, 6x 6 o 7 x 7 con juegos en espacios reducidos con varios objetivos, situaciones de 1 x 1 irán progresando a ejercicios con definición en espacios reducidos.
Patrones de juego enfocados al juego entre líneas son también trabajadas a altas velocidades con un gran nivel de ejecución técnica. Los jugadores entonces se mueven a ataques posicionales basados en transiciones rápidas.
Puntos a tomar en cuenta en sus entrenamientos:
Velocidad de circulación del balón.
Define a este aspecto como clave para ganar en el juego “moderno”. Puntos técnicos apuntan a reducir el tiempo desde el control al pase y moverse nuevamente para recibir otro pase o devolución.
Que los pases sean siempre dentro de lo posible hacia delante.
La precisión en los pases.
Los controles orientados.
Control del balón bajo presión en espacios reducidos.
Capacidad física en cualquier posición.
Velocidad de remate.
Es un entrenador reflexivo y piensa que estas son las preguntas que debe hacer un entrenador:
• ¿Porque el rendimiento varía en algunos jugadores en diferentes partidos?
• ¿Que es la organización defensiva?
• ¿Cuál es la estructura y organización del equipo?
• ¿Qué pasaría si se le cambian los roles a algunos jugadores?
• ¿Cómo se puede conseguir el equilibrio entre los diferentes elementos del entrenamiento, dirección y gerencia?
• ¿Pueden otros métodos de otros deportes ser utilizados en el fútbol?
• ¿Cómo puedo construir análisis de vídeo de encuentros en mi propia etapa de aprendizaje?
• ¿Cómo se lo puedo hacer más claro a los jugadores el porque algo tiene que ser hecho?
• ¿Cómo puedo exponer mis ideas rápidamente y simplemente para que sean entendidas?
• ¿Qué papel juegan los jugadores y el cuerpo técnico en el club?
Wenger cree que el entrenador debe tener los siguientes valores fundamentales:
• Disciplina.
• Buen orador.
• Voluntad para trabajar duro.
• Respeto hacia otros.
• Tener confianza en otros.
• Concentración.
• Atención a los detalles.
• Abierto a ideas nuevas/ dispuesto a intentar nuevos métodos.
• Calma.
• Lealtad.
Esta nota fue olvidada por un jugador del arsenal en un hotel después de un encuentro ante el Newcastle.
Encuentro del equipo. 19 de septiembre de 2008
El equipo: Un equipo es fuerte en función del relacionamiento entre sí. La fuerza de un equipo es la habilidad de sus miembros de crear y mantener relaciones que puedan generar una dimensión extra y una solidéz a la dinámica del equipo. Esta cualidad puede ser usada por nuestro equipo para focalizar los aspectos positivos que el equipo nos brinda a nuestra vida personal. Puede fortalecer y profundizar las relaciones dentro y maximizar las oportunidades que hacen a un equipo unido y sólido.
Nuestro equipo se hace más fuerte:
-Mostrando una actitud positiva dentro y fuera del campo.
-Cada uno tomando las decisiones correctas para el equipo.
-Tenga certeza que podemos conseguir nuestros objetivos basados en los puntos fuertes del equipo.
-Siempre quiera más- siempre enfoque su atención en nuestra comunicación.
-Sea exigente consigo mismo.
-Este dispuesto y bien preparado para ganar.
-Concéntrese en estar mentalmente más fuerte y siempre exíjase al límite.
-Cuando jugamos fuera de casa, crea en nuestra identidad e intente jugar el fútbol que nos gusta jugar en casa.
-Mantengase integrado y unido al grupo.
-Mantengase con los pies sobre la tierra y humilde como deportista y como persona.
-Muestre el deseo de ganar en todo lo que haga.
-Disfrute, participe y contribuya en todo lo que consiste ser un equipo.
-No subestime la fuerza de un equipo.
Tras cada partido de fútbol en bares, redacciones, redes sociales…llueven los análisis más o menos sesudos, pero todos con un afán común, buscar la clave de la victoria o la derrota. Unos apostarán por el error arbitral (la mayoría sin haber leído ni una vez el reglamento en su vida), por la decisiva calidad individual del crack del momento, la ausencia de tal jugador, los cambios del entrenador, su planteamiento o el lamentable estado de forma física del equipo sin conocer ni un solo tratado sobre el tema …
Si el universo del estudio se centra en el éxito de un equipo la línea argumental será similar; el liderazgo del entrenador, la metodología avanzada de los entrenamientos o la calidad técnica de los jugadores.
Y eso, cuando alguno más atrevido, no se pone a buscar, no sé muy bien para que, cual ha sido el mejor jugador de la historia, entonces, sin criterios comparativos, cada uno muestra sus gustos sin tener en cuenta tan siquiera que, como es lógico, el analista en cuestión ni ha podido ser contemporáneo de la mayoría de ellos, ni conoce el contexto en el que jugaron.
La discusión es una de las esencias que explican la popularidad y trascendencia de este juego tan simple. Lo que chirría más es la argumentación de algunos teóricos expertos, de un ámbito u otro del fútbol, que aún viviendo de él, se empeñan en empequeñecerlo con simplismos infantiles con los que sientan cátedra.
Recientemente lo decía en un artículo en Masliga, me cuesta cada vez más separar los análisis de fútbol con su conexión con otros deportes o con lo que acontece en nuestro entorno cotidiano.
Han sido frecuentes en mi carrera las burlas sufridas hacia algunas de mis prácticas cuando por algún traidor, que siempre existe hasta en las mejores familias, se filtraban fuera de la intimidad sagrada del vestuario. Proyecciones de vídeos sobre la caza social del lobo, para explicar el Pressing; las charlas de mi amigo, el actor Santi Rodríguez, sobre la gestión de la popularidad, con la artistaza, Luz Casal hablándoles de la creatividad o las de algunos amigos toreros acerca del miedo; partidos de jueves con la replica del sonido ambiente que podía vivir el equipo al domingo siguiente por la megafonía del estadio; el acompañamiento musical en sesiones de gimnasio o en el vestuario en los minutos previos a un partido, entre otras.
En los 25 años que llevo como profesional he hecho siempre las cosas por convicciones no por modas y he podido comprobar como muchas de estas "excentricidades" mías, eran años después elogiadas como algo revolucionario del entrenador referencia del momento y una de las claves de su éxito.
El otro día me resultó muy reconfortante escuchar al compañero psicólogo ruso, con el que trabajo en el F.C. Kairat, dar una charla a nuestros jugadores sobre la Teoría de los Sistemas. Era la forma que encontró más clara para que entendieran qué era un equipo de fútbol y cómo funcionaba. Como estoy curado de incomprensiones y su forma de manifestarse más común, la chanza, quiero compartir mis conclusiones de esta charla con vosotros, supongo que muchos conocéis esta teoría.
El universo, un país, una comunidad de vecinos, el cuerpo humano, un ordenador…todos son un sistema. Todos funcionan por elementos interrelacionados e interdependientes. Todos sujetos a unas leyes que se pueden resumir en las siguientes:
1º-La Unidad-Cada elemento que lo compone tiene sus funciones dentro del sistema
2º-Objetivo Común. Todos los elementos tienen una meta común
3º-Apertura.Cada elemento se relaciona con los otros intercambiando energía, información.
4º-Aceptación.Todos los elementos están de acuerdo en su unión.
5º- Defensa de los elementos. Los principios que rigen el mecanismo del sistema y protegen a sus elementos dentro de él.
6ª-Calidad de Integración. Todos somos uno. Y éste es más que la suma de sus partes. Este principio sólo funciona si los 5 anteriores se cumplen.
Así de forma muy simple podrían resumirse las leyes que rigen el sistema solar, el sistema que organiza a un colectivo o el que hacer funcionar al cuerpo de un ser vivo.
Algunos estaréis extrañados por leer esto en un blog de fútbol, habréis decidido no entrar más para no leer más sandeces...
Tal vez otros, al leerlo estaríais pensando en la relación de esto con lo que es la estructura organizativa de un equipo de fútbol. Espero que si es así, os escueza igual que a mi las sentencias basadas en la exaltación de lo ínfimo, de la trascendencia del detalle por encima de lo colectivo y sus interrelaciones.
El buen funcionamiento de un equipo tiene que entenderse más allá de la importancia, por muy grande que esta sea, de una de sus partes, elementos,episodios, instantes o circunstancias tomadas de forma aisladas.
Esa puede que sea una de las causas que explique cómo Messi puede ser el mejor jugador del mundo cuando juega en el Barça y un mediocre que acaba con sinfonía de silbidos e insultos cuando juega con la selección de su país.
El resultado de un partido, de los rendimientos de un equipo o de un jugador es consecuencia de más aspectos que no sólo la consecución de sus goles. Es la resultante de la suma de muchos pequeños detalles. La misión de un entrenador es conseguir que sea una suma hacia la meta y que cuantos más sean mejor.
Ver la aplicación práctica a todo esto, o no, ya es cosa vuestra.