Es un relato que nos transporta al fútbol legendario, al de la postguerra Civil Española. Aquel que servía como única válvula de escape de la miseria y penalidades que dejan tras de sí una contienda entre hermanos.
El protagonista Souto, no es más que la disculpa para hacer un retrato costumbrista de la época, pero también su historia nos obliga a reflexionar sobre la fragilidad de la fama futbolística, los valores humanos esenciales como los que engloba la ética o el amor.
La pasión por unos colores futbolísticos que corren paralelos a los de una tierra. El cruce de caminos, que solo unos pocos elegidos viven, entre su alegría por jugar sin más a hacerlo por un sueldo y por un escudo con todo lo que esto conlleva. Un telón de fondo por el que desfila la vida. Y, una vez más, el fútbol como un fiel espejo que refleja la condición humana.
Entre medias un sinfín de perlas que esconden verdades de la existencia, de la sociedad española y vasca de la época, del fútbol de entonces de siempre...
-"Por merecer tanto, el héroe se quedó sin nada".
-"En este mundo hay que tener algo grande por encima de nuestras cabezas. Unos tienen a Dios y otros al Athletic. Otros tienen a los dos, y nunca lo he entendido".
-"Sabino Arana nunca habría jugado en el Athletic, ¿sabes por qué? Pues porque lo fundaron ingleses, maketos".
-"¡Ellos siempre ganan!El Club pobre os forma y ellos se dedican a la cacea".
-"Uno de los encantos del fútbol es la democracia de los goles, pues tiene el mismo valor uno de sueño que otro metido con el culo"...
Podría seguir pero no quiero destriparos el encanto de su lectura.
Sirvan estas líneas tan sólo como aperitivo que os invite a perderos en el tiempo entre sus páginas. Seguro entre tantos paisajes evocadores del pasado encontrareis muchos presentes.
Que os guste y gracias a @niibets por tu recomendación
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